FDMESCYL renueva cinco senderos promovidos por el Ayuntamiento de Boñar y uno más en Sabero.

 Todos ellos tienen interés geológico; además tres de ellos interés natural y uno histórico cultural.

 

La Federación de Deportes de Montaña, Escalada y Senderismo de Castilla y León (FDMESCYL) ha rehomologado seis senderos de la red de León, cinco de ellos promovidos por el Ayuntamiento de Boñar, y uno más de Sabero.

Estos senderos, presentes desde 2011 en el Registro de Senderos Homologados de Castilla y León, han superado la rehomologación durante el mes de diciembre; proceso obligatorio cada cinco años a través del cual se determina que los senderos homologados siguen cumpliendo las condiciones de seguridad y calidad necesarias.

Con estas rehomologaciones la provincia de León cuenta en la actualidad con nueve senderos homologados, que suman un total de 74 kilómetros. En el conjunto de Castilla y León hay 170 senderos de pequeño recorrido homologados, que suponen casi 2.000 kilómetros.

Los senderos rehomologados en diciembre son:

– PRC-LE 55 “Ascensión al Pico Cueto”: Es el más largo, una ruta circular de casi 16 kilómetros, que se tardarían siete horas en recorrer. La ruta se inicia en el área recreativa de Boñar denominada El Soto. Los más avezados pueden terminar la ascensión y hacer cumbre en Pico Cueto, cuyas vistas merecen el último esfuerzo de la subida.

Más información: http://senderismocastillayleon.com/sendero/prc-le- 55-ascension- al-
pico-cueto/

– PR-LE 56 “Por el río Porma”: Es el único de estos senderos cuya ruta es lineal, de casi tres kilómetros y medio, con una duración de dos horas. La ruta parte de la localidad de Cerecedo a orillas del Río Porma y su primer tramo discurre paralelo a éste, donde se puede contemplar la vegetación de ribera que marca el trazado del río. Siguiendo su curso, el sendero alcanzará el puente que cruza hacia la localidad de Valdecastillo, donde se llega al fin de la ruta.

Más información: http://senderismocastillayleon.com/sendero/pr-le- 56-rio- porma/

– PRC-LE 57 “Las Ermitas”: La ruta comienza y termina en la localidad de Grandoso, por un camino que nos lleva a la ermita de La Encarnación. Es un recorrido circular de casi diez kilómetros y medios con un tiempo estimado de cuatro horas y media.

Más información: http://senderismocastillayleon.com/sendero/prc-le- 57-las- ermitas/

– PRC-LE 58 “Camino tradicional de Adrados a Vozmediano”: Se trata de una ruta circular con comienzo y fin en la localidad de Adrados, que recorre casi 12 kilómetros y se tardaría cinco horas y media en completar. La ruta va ascendiendo suavemente, de una forma casi imperceptible por el caminante, combinando trazado por robledales y por zonas de pasto, hasta llegar a un pequeño collado situado en una zona de pradera.

Más información: http://senderismocastillayleon.com/sendero/prc-le- 58-camino-
tradicional-adrados- vozmediano/

– PRC-LE 59 “Por Valdehuesa”: Es el sendero más corto de los recién homologados, de poco más de cuatro kilómetros, en una ruta circular de apenas dos horas de recorrido. La ruta parte de Valdehuesa a la salida de esta localidad en la carretera a Rucayo, remontando el arroyo de Valdehuesa por un camino de uso agrícola, de suave pendiente, que va rodeando la Peña de La Arvellosa.

Más información: http://senderismocastillayleon.com/sendero/prc-le- 59-valdehuesa/

– PRC-LE 60 “Ruta de las Minas”: Discurre en un maravilloso entorno natural y cultural. Parte del Museo de la Siderurgia y Minería de Sabero, punto clave para interpretar el resto de la ruta, y a lo largo del camino nos encontraremos con la Ermita de San Blas y antiguas boca- minas: ‘Mariate I’, ‘Mariate II’, ‘La Juanita’, ‘La Imponderable’. Por todo ello, además de su interés geológico, tiene interés histórico cultural. Tiene una longitud aproximada de 9,5 kilómetros, por lo que está clasificada como una ruta de pequeño recorrido (PR), con un tiempo estimado de tres horas.

Más información: http://senderismocastillayleon.com/sendero/prc-le- 60-ruta- las-minas/

Todos estos senderos tienen interés geológico, según las etiquetas de senderismo como experiencia que otorga la FEDME (Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada) para dar valor añadido a los senderos. Tres de ellos además – ascensión a Pico Cueto, por el río Porma y por el camino tradicional de Adrados a Vozmediano- son interés paisajístico y la Ruta de las Minas tiene además interés histórico cultural.

Sendero homologado

El sendero homologado es una instalación deportiva, identificada por las marcas registradas de GR®, PR® ó SL®, que se desarrolla preferentemente en el medio natural y sobre viales tradicionales públicos o privados. Es un entramado de caminos señalizados bajo unas normas estandarizadas y reconocidas a nivel internacional y que han pasado el sello de calidad de la Federación de Deportes de Montaña, Escalada y Senderismo de Castilla y León (FDMESCYL) para su homologación, cumpliendo con los criterios establecidos por la FEDME (Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada).
Todos los senderos pasan unos rigurosos controles para formar parte del registro de senderos homologados que se deben renovar cada cinco años.
Los senderos homologados de Castilla y León, así como el proceso de homologación, se encuentran en la página web de la Federación: http://senderismocastillayleon.com/ en la web de la FEDME misendafedme.com y en el perfil ORG de Wikiloc de la FDMESCYL.
El objetivo de homologar los senderos es facilitar la práctica del senderismo, preferentemente en el medio natural, proporcionando seguridad, calidad e información sobre la actividad que va
desarrollar, así como incentivar el conocimiento del entorno natural y de los elementos de la tradición rural de los espacios por donde se transita, buscando una práctica deportiva respetuosa cultural y ambiental.

La triple S

Los senderos homologados se basan en tres conceptos:

  •  Seguridad del senderista, como punto de partida ineludible de cualquier proyecto de senderos GR®, PR® y SL®.
  •  Sostenibilidad en la implantación de cualquier sendero GR®, PR® o SL® abarcando desde el
    propio diseño del mismo de bajo impacto, hasta los ineludibles programas de mantenimiento.
  •  Satisfacción del senderista, que se dirige a formular las propuestas de senderos desde los intereses y necesidades del usuario, y no del promotor o federación.