El Castro Valnera nos transporta a tiempos pretéritos, vistas infinitas a los cuatro puntos cardinales. Entre las Merindades burgalesas y los valles pasiegos de Cantabria, y la comarca de Alto Campoo con el Pirineo navarro.
Entras las Merindades y los valles Pasiegos
En los confines del norte de la provincia de Burgos donde se juntan las Merindades y los Valles Pasiegos existe un precioso macizo calizo donde el tiempo parece haberse detenido. El Castro Valnera, con sus 1718 metros, es la montaña más alta de la zona y no es superado en altura, en esta zona norte de la península, desde las cumbres del Alto Campóo, por el oeste, hasta el Orhi, en el Pirineo Navarro por el este. Esta gran prominencia y los escasos 35 kms. que separan esta cumbre del Mar Cantábrico convierten al Castro Valnera en un espectacular mirador con vistas infinitas hacia todos los puntos cardinales. Solo por ello ya merecería la pena su ascensión, pero además en esta ruta descubriremos un montón de preciosos rincones que nos harán llegar de vuelta al punto de partida con una gran sonrisa en la cara y la sensación de haber acertado eligiendo esta sensacional montaña. Vamos allá!
¿Desde dónde empezar? Las Cabañas del El Bernacho
La ruta comienza en la Cabañas de El Bernacho. Un bucólico y pintoresco grupo de construcciones de piedra ubicadas en un curioso valle glaciar que surge de la falda este del Castro Valnera. Llegaremos a ellas por una pista de tierra que sale desde las inmediaciones del kilómetro 3 del tramo de la carretera BU-572 que une Las Machorras con el Portillo de Lunada. Cerca del final de la pista podemos aparcar nuestro vehículo en donde veamos más conveniente poniendo especial cuidado en no entorpecer la circulación ni las labores de los pasiegos en sus cabañas.02 El Bernacho. Curva de donde sale el sendero de subida
Nuestra ruta empieza unos 700 metros antes de terminar la pista en un apartadero cerca de un muro de piedra. El grupo de cabañas de El Bernacho es tan bonito que nos invita a quedarnos en él disfrutando de tan pintoresco lugar. Pero no sucumbimos a sus encantos y en una marcada curva a la derecha (oeste), cerca del final de la pista, encontramos el inicio del camino que sube hacia el sur para entrar en el gran valle que separa las cumbres del Castro Valnera de La Cubada Grande. El camino sube de manera muy agradable alternando zonas de bosque de hayas jóvenes, abedules y serbales con grandes claros de brezo y rocas. Poco a poco vamos ganando altura y unas revueltas nos avisan de la cercanía de un collado donde poder recuperar el aliento. La espectacular vista de la esbelta silueta de La Capía nos dará ánimos para seguir con la ascensión.
Un precioso escarpe nos sirve de balconada para llegar a ver el mar
Desde el collado la senda ataca la ladera sur del Castro Valnera con unas hábiles revueltas que van buscando los mejores pasos para superar una barrera rocosa.09 Cabañas de Lelsa 700 metros más abajo La ladera se va haciendo un poco más tendida y subiendo en dirección norte/noroeste buscando la traza más cómoda posible llegamos a un espectacular collado en plena arista. Giramos a la izquierda (sur) y poco después, pasados unos escalones rocosos, el vértice geodésico y un buzón, nos anuncian que estamos en la grandiosa cumbre del Castro Valnera. El panorama es espectacular, pero lo que más llama la atención es el tremendo precipicio que cae hacia la vertiente pasiega donde verdes valles tapizados de pequeñas cabañas nos van llevando la vista hasta la línea del mar que parece quedar a tiro de piedra.
Tras la cumbre comienza el descenso
Desde el collado la senda ataca la ladera sur del Castro Valnera con unas hábiles revueltas que van buscando los mejores pasos para superar una barrera rocosa. 10 Bajando hacia la Pirulera con el Picón del Fraile al fondo. La ladera se va haciendo un poco más tendida y subiendo en dirección norte/noroeste buscando la traza más cómoda posible llegamos a un espectacular collado en plena arista. Giramos a la izquierda (sur) y poco después, pasados unos escalones rocosos, el vértice geodésico y un buzón, nos anuncian que estamos en la grandiosa cumbre del Castro Valnera. El panorama es espectacular, pero lo que más llama la atención es el tremendo precipicio que cae hacia la vertiente pasiega donde verdes valles tapizados de pequeñas cabañas nos van llevando la vista hasta la línea del mar que parece quedar a tiro de piedra.
Observaciones
- No se trata de una ruta técnicamente compleja. Sin embargo, en invierno con nieve se deben tomar todas las precauciones necesarias y contar con el equipo adecuado
- En invierno se debe contar con preparación tanto física como técnica adecuada para llevar a cabo esta ruta.
Cómo llegar
Llegaremos por una pista de tierra que sale desde las inmediaciones del kilómetro 3 del tramo de la carretera BU-572 que une Las Machorras con el Portillo de Lunada. Cerca del final de la pista podemos aparcar nuestro vehículo en donde veamos más conveniente poniendo especial cuidado en no entorpecer la circulación ni las labores de los pasiegos en sus cabañas.
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